Hola Laura,
Tu pregunta es corta y un poco inespecífica, por lo cual mi respuesta será un poco larga. Trataré de responderte de una forma general.
El deterioro del lenguaje puede deberse a muchos factores: ansiedad, efectos secundarios de algunos medicamentos, daño cerebral, envejecimiento, etc.
Somos, en cuanto comportamiento, básicamente, química cerebral (ojo, he dicho, en cuanto comportamiento, no en cuanto al Ser). El funcionamiento del cerebro se basa en la activación y desactivación constante de “caminos” (conexiones neuronales) capaces de conducir señales eléctricas.
Constantemente la química cerebral está variando, a la vez que se están creando, reforzando y debilitando multitud de conexiones neuronales. Conforme vamos madurando las diferentes vicisitudes que se nos presentan en la “selva social” (problemas laborales, sentimentales y de salud), dan lugar a importantes cambios en la química cerebral, lo que se traduce con bastante frecuencia en irritabilidad, ansiedad, depresión y comportamientos neuróticos. Dicha química cuando es repetitiva, a lo largo de un tiempo, crea una adicción química, y eso da lugar a repeticiones conductuales, que se traducen como historias repetitivas en nuestra vida.
Estoy hablando de química cerebral (de acuerdo a tu pregunta), pero en realidad, existe una conexión entre pensamientos-emociones-química-conducta. Y no podemos obviar ninguna de esas partes.
Como ocurre con los músculos y huesos, el cerebro también se ve afectado por el “desgaste” del paso del tiempo. Pero así como un octogenario puede duplicar su fuerza con entrenamiento de resistencia, empezando a entrenar a sus ochenta y pico años. Y así como una persona de avanzada edad con osteoporosis, puede con el ejercicio, hacer que sus huesos se mantengan más fuertes. Asimismo, EL DETERIORO CEREBRAL PUEDE DESACELERARSE. Pues “LO QUE NO SE UTILIZA SE ATROFIA, Y LO QUE SE UTILIZA SE DESARROLLA”. Por eso a través de la gimnasia cerebral (leer, escribir, conversar,…) la funciones mentales pueden verse muy reforzadas. Me refiero a funciones mentales como el lenguaje, el raciocinio, la memoria, y las capacidades de abstracción y de cálculo.
No nos olvidemos de las actividades lúdicas, artísticas, relajantes y físicas. Las actividades lúdicas para fomentar la alegría. Las artísticas (dibujar, pintar,…) para desarrollar el alma y el hemisferio derecho. Las relajantes (relajación, meditación, auto-observación, tai chi chuan, qi gong,…) porque un cuerpo relajado (física, mental y emocionalmente) aquieta la mente, y la fortalece. Y físicas (ejercicios aeróbicos, de flexibilidad y de fuerza) porque no hay mente sana sin cuerpo sano. Así pues, no debemos dejar de lado el ejercicio físico, el cual contribuye a mejorar la calidad de la química cerebral, así como su rendimiento. Cuanto mayor se hace una persona, más importante es la realización del ejercicio físico (adaptado a su capacidad, por supuesto). Sobretodo es muy importante hacer ejercicio a partir de los cuarenta años. Por lo tanto, una persona de ochenta años, también tiene que hacer ejercicio físico. Y si tiene artritis, también tiene que hacer ejercicio. El cuerpo y la mente, se nos han concedido para utilizarlas. Por lo tanto, no dejemos que el cuerpo, la mente y el lenguaje se deterioren.
Seamos poetas, artistas y gimnastas; no sólo para vivir más años, sino para vivir con mejor calidad de vida.
Espero haber contestado a tu pregunta.
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Un saludo.
Ricard López
Psicoterapeuta y graduado en Medicina Tradicional China
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